A dos meses de la muerte de Jairo Mora, defensor de las tortugas en Moín, además de la impunidad que aún cubre a sus asesinos, preocupa que los planes por terminar de industrializar la playa de Moín van más rápido que los de conservar sus ecosistemas, deseo al que el ecologista entregó su vida. El trágico (pero previsible) hecho, es una señal del estado de contradicción ambiental en Costa Rica. A partir de lo anterior, en este trabajo se realiza un estudio de la zona donde ocurrió el asesinato, específicamente, en relación con la construcción de megaproyectos y su incidencia en el ecosistema, así como la supervivencia de las tortugas que defendía el ambientalista.
Ver completo en http://feconcr.org/doc/jairo/Moinentremegaproyectosytortugas.pdf
Mauricio Alvarez es Presidente de la Federación Ecologista